jueves, 14 de junio de 2012


EL CALDEN DICHOSO  - HISTORIA II
RÍO SOBRE PUENTES TURBULENTOS
Como todos sabemos el pueblo “El Calden Dichoso” está separado o unido según como se lo mire por el río Quelu Leufu, la forma de comunicarse entre una orilla y la otra es a través de tres puentes: uno por donde circula el tren y algunos peatones, otro transitado por vehículos y algunos peatones y otro por cual van y vienen peatones, otros medios de movilidad como ciclomotores, bicicletas, algunos a caballo además de perros y gatos. Unos meses atrás como lo contamos en el relato anterior hubo elecciones en el pueblo “El Calden Dichoso”, recordamos que ganó el partido de la derecha con el 80% de los votos, el partido del centro logró el 15% y el partido personal el 4%, 1% de votos en blanco, no hubo partido de la izquierda, ni anarquistas. Aunque ustedes saben los anarquistas no participamos en esas elecciones, en realidad el anarquismo no es un partido, ni una tercera alternativa, es mas bien una filosofía de vida. En el pueblo ya nombrado aproximadamente el 75% de lo habitantes del lugar se moviliza en vehículos a motor, es decir que no solo el sedentarismo se manifiesta en el hogar, sino que también se practica cuando los ciudadanos se trasladan de un lugar a otro, el móvil avanza mientras el conductor y los que lo acompañen continúan alimentando el sedentarismo. Ahora bien para cruzar el río en vehículo hay un solo puente disponible, de los 75% que poseen vehículo, cuantos necesitan ir y venir varias veces al día a una y otra orilla ? será el 3%, no mas del 5%. ¿ es necesario construir otro puente sobre un río con cada vez menos agua, que pronto lo cruzaremos andando?. La demora de la construcción del puente nuevo ha perturbado los ánimos de los sedentarios, tanto es así que tras varios años de idas y vueltas han solicitado la presencia  de autoridades de “Huecuvu Mapu” que es la provincia que cobija a “El Calden Dichoso”. Al llegar las autoridades, se sentaron apoyando sus brazos en una mesa, frente a un grupo de vecinos, no mas de cincuenta, el pueblo no estaba. Queda demostrado aquí que entre autoridades y el pueblo no existe puente que los comunique, que los una, también quedó a la luz que para construir un puente de no mas de 150 mts de largo por 25 mts de ancho es vital salir indemne de un turbulento y furioso río de burocracia, torrentes de papeles, cascadas de normativas, sin duda es necesario tener conocimientos de rafting, buceo, canoaje, nadar perrito y otras técnicas acuáticas. Muchos de los que bregan por el nuevo puente, años atrás cortaban con sus vehículos los puentes existentes, no pudiendo los peatones ni siquiera cruzar caminando, la voz popular dice que esos cortes eran porque le habían tocado la billetera, la misma voz popular también cuenta que  conquistar derechos provoca alegría mientras que perder privilegios provoca rencor, en fin, el pueblo “El Calden Dichoso” vive horas cruciales para su no extinción, son días de decisiones extremas, de las autoridades por un lado y del pueblo por el otro: los puentes, el río sin agua, trenes de una multinacional tan largos y contaminantes como la corrupción que pasarán por el medio del pueblo, crímenes sin resolver, violadores sueltos, pozos sobre calles con olor a cloaca, vecinos sin trabajo. En un momento de la exposición de las autoridades, que nadie escuchaba, irrumpe en la sala aquel vecino del relato anterior que siempre camina con un libro bajo el brazo, se para delante de las autoridades y de los vecinos que quedaban, varios se habían retirado, algunos dormitaban ante tanta palabra vacía. Señores, les dijo abriendo un libro de José Ingenieros, les leo algunos textos cortos, lo hago ante tanta mediocridad de argumento que se han expuesto aquí, al pasar las hojas del libro se detiene en una y lee: “ahora o nunca, mañana es la mentira piadosa con que se engaña las voluntades moribundas”, y sigue “la sociedad convertirá en derecho todo lo que la caridad otorga en favores”, avanza varias páginas y se detiene: “los pueblos sin dignidad son rebaños, los individuos sin ella son esclavos”. Basta de engaños y mentiras, el pueblo se está cansando. Cerró el libro y se fue, afuera el viento comenzó a hacerse dueño del día, el vecino y su libro se esfumaron por una calle polvorienta. Las autoridades siguieron hablando, indiferentes, los del partido de la derecha, los del partido del centro, no había representantes del partido personal, ni de la izquierda. Había comenzado a correr el rumor de una gran asamblea de anarquistas en los próximos días para analizar la situación del pueblo “El Caldén Dichoso” en el “Huecuvu Mapu”.

LOS PERSONAJES SON FICTICIOS, CUALQUIER COINCIDENCIA CON LA REALIDAD ES MERA CASUALIDAD