Nacemos con necesidades vitales: alimento, descanso, afecto, juego. Transcurren nuestros días y esas necesidades están siempre presentes, una en menor medida que otra, en circunstancias diferentes, pero siempre presentes. para satisfacer la necesidad de jugar, el hombre comprendió que necesitaba jugar con alguien entonces buscó un compañero de juego como compañero de equipo o adversario. A veces ese adversario es invisible, nosotros mismos, estando solos, nos hemos inventado un adversario, obvio, al que siempre le ganamos. El hombre también supo transmitir las vivencias a lo largo de los tiempos, de generación en generación y en todas las comunidades se fueron difundiendo los juegos. Sin duda el elemento que significó una bisagra en la historia lúdica, que produjo y produce una atracción difícil de describir: la pelota. Los Mayas, Los Aztecas jugaban con pelota de caucho que los eurpeos la conocieron luego de la conquista. Los pueblos originarios de América a través de juegos, hacían que los niños comiencen a adquirir técnicas básicas para el posterior desenvolvimiento en la vida adulta, facilitando la supervivencia. Por ejemplo los niños Onas de Tierra del Fuego jugaban a juntar bichitos, piedras, palitos, fabricaban juguetes con maderas y pieles, a los varones los papás les fabricaban arcos y flechas de menor tamaño, ¿chupetes? si un pedazo de grasa de lobo marino. Con seguridad e cada una de las culturas, también se han hecho presente los estados de ánimo, en la derrota y en el triunfo. Si nos trasladamos a otras comunidades los Griegos fueron los creadores de los juegos olímpicos que se celebraban en la ciudad de Olimpia hace 4.000 años ellos jugaban y practicaban gimnasia por tres razones fundamentales: temnplar el espíritu, prolongar la vida, fortalecer el físico.El juego ha evolucionado con el hombre a lo largo de su historia y se ha mantenido latente esa necesidad de jugar.
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